Llevo varios años celebrando la aparición de la Virgen Morena, La Guadalupana y ha sido una gran bendición.
Desde que conocí su historia me cautivó y he sido muy afortunada porque he podido ir a México donde se apareció y he visto su intercesión ante Dios.
Los Mexicanos hacen sacrificios y llegan de todas partes y desde lejos que les toma varios días pero le presentan sus ofrendas a la Virgencita de Guadalupe. Es un acto de amor a nuestra Madre María.
Le llevan serenatas y “las mañanitas” son más hermosas con los mariachis y la Guadalupana En México llevan años haciendo eso yo, desde el 2003. La busco todos los días y le hago un rosario aunque sé que muchas veces son distraidos y hasta interrumpidos pero ella me escucha y me resuelve.
Gracias Virgencita por estar en mi vida y mi familia. Te pongo nuestras peticiones a Dios (salud, prosperidad, amor, paz… y más para todos especialmente los míos) que seas nuestra intercesora. Gracias, gracias y gracias. En tus manos mi Dios.